El sentir de esta damnificada de Santa Lucia, su rabia y su impotencia son compartidas por manatieros que acusan al gobernador del departamento del Atlántico, Doctor Eduardo Verano de la Rosa, de no haberle prestado suficiente atención a los manatieros y aun peor, de haber querido sacrificar a Manatí para aliviar la crisis causada por el invierno en otros municipios.

Muchos manatieros acusan al gobernador, entre otras cosas, de negligente, se pone además en entredicho sus intenciones de tapar a tiempo el boquete que se abrió en el canal del dique. Esto es lo que piensan los manatieros tras una supuesta propuesta del mandatario departamental que precisamente consistía en meter agua a la ciénaga de Manatí.

Esta acusación cobró más fuerza ya que cuando se abrió el boquete en el canal del Dique este apenas medía 15 metros y no se tomaron medidas con la rapidez necesaria para evitar que este se hiciera más grande, en estos momentos el daño está hecho, el boquete llegó a mas de 126 metros, Manatí y los pueblos vecinos están inundados y esto, que a cada momento sigue empeorando, apenas está comenzando.

El hecho de que el área donde se abrió el boquete era terreno firme no hace sino complicar más las cosas ante la posibilidad de que haya habido manos criminales detrás de todo esto.